¿Tienes miedo a poner límites?

 

“atreverse a establecer límites es tener el coraje de amarnos a nosotros mismos, incluso cuando corremos el riesgo de decepcionar a los demás

Brene Brown

 

¿Necesitamos límites en nuestras relaciones?

En muchos casos… ¡Sí!

Los límites marcan el comportamiento adecuado entre unos y otros.  Con frecuencia esos límites se traspasan por parte de una persona y en detrimento de otra.  Es esta otra, a su pesar, la que tiene que aprender a “levantar esas vallas”, para no ser absorbida y diluida en las emociones ajenas.

Esto sucede en todo tipo de relaciones, familiares, laborales, amistades, etc.  Cada uno somos distinto del resto y necesitamos nuestro espacio físico y emocional alrededor.  Esto existe sin más, sin que nos propongamos crearlo y debería ser saludable y flexible.  Pero si es traspasado por alguien o algo que yo no he buscado, no entiendo, no acepto, etc., me generará conflictos que me mantendrán en la desazón como poco.

En definitiva, hablamos de Habilidades Social y esta, establecer límites es una de las más importantes.  Esta habilidad tiene sus raíces en una comunicación clara.  Cuanto más claramente nos expresemos y determinemos nuestros límites, más probabilidades habrá de que sean respetados.

Recuerda que tus límites establecen dónde termina tu espacio y comienza el de la otra persona.  Así que sí, señala y explica qué límites protegen tu bienestar mental, físico y emocional para que puedas fomentar relaciones saludables en todo aquello que te rodea.

¿Qué son límites saludables?

Es sencillo.  Esos que pones en torno a tu tiempo, emociones, cuerpo y salud mental para mantenerte resiliente, fuerte y contento con quien eres.  Estas “fronteras” te protegen de ser utilizado, agotado o manipulado por otros.

Es verdad que no son tan claro como una bonita valla pintada de blanco, por ejemplo. No son un muro y no tienen un letrero de “prohibido el paso”, pero los límites saludables comunican lo que tolerarás o no a los demás.

Si lo haces, si trabajas y manifiestas tus límites saludables, te sentirás más fuerte emocionalmente y tus niveles de estrés bajarán, sencillamente porque tu autoestima estará en equilibrio.

Algunos pasos para empezar este camino:

·        Reflexiona sobre las razones de tus límites

·        Identifica lo que quieres

·        Identifica la motivación para establecer el límite

·        Comienza con poco, eligiendo solo un límite para establecer

·        Mantén la calma y usa la comunicación asertiva

·        No te disculpes ni te justifiques

·        Prepárate para un ¨no¨ como respuesta

·        Prepárate para decepcionar a los demás

·        Confía en tu intuición

·        Trata de ser coherente con tus límites

 

 

 

Almudena Alcaide Martín

Salud Emocional